jueves, 24 de mayo de 2018

Un republicano opina


A propósito de "Democracia"...
¿El hambre y la democracia son compatibles?
¿La desvalorización de la enseñanza pública y la democracia son compatibles?
¿La privatización de la sanidad y otras conquistas sociales hasta hacerlas desaparecer son compatibles con la democracia?
¿Una monarquía impuesta por un dictador es compatible con la democracia?
¿Qué la Iglesia esté exenta de impuestos y reciba millonadas del estado, se entremeta en la vida civil de los ciudadanos con total impunidad, nos quiera imponer con la colaboración de los gobernantes de turno su rancia “moral” es compatible con la democracia?
¿Qué los gobernantes se asignen sueldos de ensueño mientras en el país hay seis millones largos de trabajadores en paro forzoso o en contratos de miseria y precaridad es compatible con la democracia?
¿Qué la justicia actúe con lentitud y pasividad cuando los delitos los hacen los de “arriba” y con contundencia y rapidez si pueden achacar algo al pueblo es compatible con la democracia?
¿Qué la ley electoral favorezca el bipartidismo de dos grandes partidos frente a las demás opciones minoritarias es compatible con la democracia?
¿Que las ILP se las pasen por el forro los “mayoritarios en el parlamento es compatible con la democracia?
¿Qué los parlamentarios elegidos estén la mayor parte del tiempo ausentes del parlamento pero que cobren con seguridad todos los meses es compatible con la democracia?
¿Qué los patronos puedan hacer un ERE cuando les viene en gana y dejar a cientos de trabajadores en la calle es compatible con la democracia?
¿Qué los Bancos y Cajas estén "arruinados y en semiquiebra" por la mala administración, el chanchullo generalizado, el descontrol, la corrupción, el favoritismo a los amigos de los políticos de turno, la especulación, las apropiaciónes indebidas... y ahora tengamos que pagar el resto del país sus "fechorías" es compatible con la democracia?
¿Qué los alcaldes y concejales se pongan sueldos que jamás hubieran alcanzado en una actividad privada y que merman nuestros derechos a recibir servicios y atenciones es compatible con la democracia?
¿Qué las gentes después de perder el trabajo, el hogar, el subsidio... no tengan para atender las diversas necesidades de su familia es compatible con la democracia?
¿Qué seamos el país de Europa que tiene mas policías por habitante es compatible con la democracia?
¿Qué la deuda originada por la combinación del mal hacer del capitalismo especulador y la mala gestión del gobierno de turno recaiga sobre la inmensa mayoría de trabajadores de este país, mientras los causantes, las grandes fortunas, las SICAV... se van de rositas es compatible con la democracia?
¿Por qué a los que no les queda más opción que acudir a la protesta ante autoridades tan arbitrarias e insensibles son tachados y calumniados de ser pro-amigos de los terroristas? ¿Es compatible semejante falsedad con la democracia?
¿Qué...?
¡Cuántos “qué”, preguntas y situaciones podríamos enumerar sin respuesta y sin cabida en esta pseudo-democracia!
Quizás ha llegado la hora de gritar abajo las "caenas" y conquistar la libertad y la democracia económica, política y social y eso hoy por hoy no lo puede ofrece la falsa política en la que nos tienen.
Ahora más que nunca el desafío que nos planteamos es trabajar para traer LA III REPÚBLICA.
Salud y República


miércoles, 23 de mayo de 2018

Un republicano opina

¿POR QUÉ LOS REPUBLICANOS NO DESPEGAMOS? DEMOS EL PASO.

Necesitamos consolidarnos como partido para influir, ayudar y acercar la República a la ciudadanía de nuestro entorno y ámbito de influencia.
Desde un tiempo ya, asistimos a la aparición de pequeños partidos, de grupos, de ateneos, de iniciativas y movimientos netamente republicanos en nuestro país , las calles se van llenando de gentes y Banderas Tricolores como respuestas a los problemas que nos agobian... y sin embargo no conseguimos consolidarnos como un partido o movimiento que reivindica la República, que tiene las soluciones a los problemas de la ciudadanía, que hay una alternativa ciudadana y progresista frente a la monarquía y sus diversos gobiernos que nos han sumergido en este caos político actual, donde la corrupción, la precariedad y la falta de libertades y perspectivas de progreso cada vez se ahondan más y acortan e imposibilitan un futuro de libertad, de empleo, de cultura, de participación... en definitiva de  progreso social y justicia.
Ciertamente algo estamos haciendo mal y nos lo debemos plantear para corregir esas situaciones y lograr crecer como organización específicamente republicana en el ámbito estatal.
Pero también es cierto el miedo y la ignorancia política propiciados desde el poder para paralizar las iniciativas de los ciudadanos de cara a organizarse en un partido republicano.
También ha influido en esta parálisis el abandono por parte de la izquierda “clasica” de las ideas republicanas, de esa polÍtica nefasta de que ahora no es el momento, de que suena a viejo y perdedor, que ahora son otros los problemas inmediatos a resolver... y se hacen promesas que “alagan” el oído, que no resuelven nada, salvo la cotización y el status de quienes las hacen y definitiva consiguen que el régimen se consolide e incluso marque “notas” como que nada tiene que ver con el pasado del que es herencia... Ya soportamos dos reyes, dos cortes, la tiranía de los bancos y especuladores, la agresión de la iglesia a cualquier movimiento de progreso y despegue...
Por otra parte en la jerga popular todavía persiste, esa idea tan divulgada por el anterior régimen y su continuación actual de que hablar de República es igual a comunismo. Con lo que la pequeña burguesía y aquellos trabajadores mejor situados económicamente caen en un "absurdo" terror a perder bienes y situaciones socioeconómicas... Nada más lejos. Hablar de "República de los trabajadores de todas las clases" tiene como traducción el derecho a ganarse la vida y un lugar en la sociedad para todos aquellos que trabajen y cooperen con sus esfuerzos, independientemente de sus estatus social y profesional, a la vida política, económica y social del país. Por lo tanto nada que ve con el comunismo, entendido éste como los modelos que en Europa del Este o en China han terminado desembocando en modelos de capitalismo de estado, de formas autoritarias, en definitiva de capitalismo salvaje.
"República es hablar de libertad", es elegir y deponer a quienes traicionen los programas para los que fueron electos, es el libre a acceso a la educación y a la protección del estado de derecho. 
"República es hablar de igualdad" de todos sin excepción ante la Ley. Es crear un marco social de protección que acoja a los más desventurados hasta conseguir su plena integración e igualdad con los demás. Hablar de "República es hacer realidad la fraternidad y el humanismo", es sustituir la cruel competencia por la cooperación.
¿Cómo tan nobles principios no terminan de calar en nuestra sociedad y la empujan hacia las deseadas metas de justicia y solidaridad que necesitamos para sobrevivir como pueblo soberano?
Amigos, compañeros necesitamos ser un partido político con presencia en las calles, entre los ciudadanos, nutriéndonos de sus aspiraciones, siendo su voz y su conciencia y necesitamos presencia en las instituciones no para juramentarnos en reformarlas y que pervivan sino para luchar desde dentro también para superarlas. Necesitamos que en el congreso y en las autonomías haya una voz clara y honesta que diga “no así, sí a la Republica...” Debatamos, divulguemos nuestros principios, comportémonos como honestos ciudadanos, perdamos los miedos y seremos el fermento del partido que la sociedad necesita para avanzar, para lograr la libertad, la igualdad y la fraternidad para todos.
Salud y República