Salva opina

Transfuguismo, desencanto y sus consecuencias.


Estamos viendo y sufriendo , con bastente frecuencia, como algunos políticos cambian una vez iniciada la legislatura o el mandato municipal de partido y o se convierten en "independientes" que apoyan a otra opción que no ganó en su momento. Esto se suele dar entre todas las llamadas fuerzas políticas, especialmente entre los mayoritarios PP Y PSOE, pero tambien hay casos en Andalucia de Izquierda Unida. Los tránsfugas , independientemente de su origen político y del espaldarazo que den a la otra opción que con su "desinteresada ayuda" se convierten en ganadores frente al veredicto de las urnas, suelen salir muy bien parados, esto es pagados y situados ( recuérdese, por ejemplo, el caso de la tránsfuga socialista que aupó con su voto al Sr. Zaplana en Benidom en 1.991 y que todavía sigue enchufada de asesor cultural con un sueldazo). El transfuguismo se ha convertido en una enfermedad, con riesgo de pandemia, de nuestra "democracia" formal a la española, pues, recordemos que la nuestra (el llamado estado democrático) fue una concesión de los herederos del franquismo a cambio de renunciar los demócratas y las izquierdas a la reparación de las víctimas del régimen dictatorial precedente y el castigo de los franquistas con las manos manchadas de sangre o corupción o apropiacion indebida de bienes de los perseguidos que todo hubo. Todo esto, junto con las torpezas de los que gobiernan (recordemos que llegaron a negar que viniera una crisis, y las cambios contradictorios de soluciones propuestas frente a la misma, y al apoyo dado a los grandes banqueros, al enfrentamiento visceral entre las fuerzas politicas predominantes...), lleva a muchos ciudadanos a lejarse del interés por lo político y a extender y adoptar la creencia de que todos los que actúan en política son iguales (deshonestos, interesados, dispuestos a todo para su beneficio personal, corruptos...). Y esto si es un gran peligro, pues, cuando la gente se desentiende de la política como arte de gobernar y participar en la vida pública, se suelen aprovechar y crecer de forma imparable los grupos xenófobos y fascistas y cuando menos te des cuenta los tiene ahí. Por lo que es muy aconsejable que acudamos a la Historia para no repetir los errores de antaño.