LOS FASCISTAS, LA DERECHA, LOS CURAS, LOS SOCIAL-LIBERALES... Y NUESTRO PUEBLO.
Los fascistas nunca vienen de cara: la cobardía y la maldad les acompaña siempre y cuando menos te los esperas te salen por la espalda. Hoy más listos y preparados que ayer forman parte de la derecha "democrática" (vaya ironía de la historia). La “derechona” tras haber cogido el estado entre sus manos pretende terminar de apretarnos y estrujarnos, para que la crisis no le cueste nada a los banqueros y especuladores, sus amos. Los trabajadores somos los “paganini” electos o mejor designados y obligados.
Los curas predican a voz en grito resignación, aceptar las cosas tal como vienen (“la voluntad de Dios”, “Él nos lo da, Él nos lo quita”) y prometen el paraíso a los que traguen y re-traguen. “La causa de nuestros males son los pecados y el abandono de dios por nuestra parte..." Vamos un cuento de más de dos mil años.
Los social-liberales (que suelen presentarse con las siglas usurpadas al socialismo) están en plena caída al abismo y sin obtener la consideración y el favor político de sus votantes desilusionados, dando un espectáculo de enfrentamiento interno (aparato del PSOE contra el aparato del PSC y viceversa) tras la entrega del poder a los peperos. Hoy asumen el papel de defensa de la monarquía unos con el borbón padre, otros apostando por el hijo. Vamos un espectáculo de fulanismo político y dejadez absoluta de principios sociales e igualitarios. Si a esto añadimos la contaminación de la corrupción...
Nuestro pueblo sigue/seguimos despistados, sin querer enterarnos colectivamente claro, del precio de la crisis que estamos soportando, cuando ni hemos pinchado ni cortado en su generación. El hiper-consumo inducido e “inyectado en vena” nos tiene idiotizados pese a las dificultades monetarias y laborales actuales para seguir accediendo y acrecentando nuestro papel de dependencia y sumisión. Los medios de idiotización generalizada (prensa, TV y voceros pertinentes) que no cesan en proporcionarnos morralla de la más baja calidad para alimentar nuestra pasividad y sobretodo la baja autoestima de la clase trabajadora que nos lleva a dormitar nuestra conciencia de clase y todo pese a las movilizaciones sindicales, los escándalos de corrupción, los desahucios de nuestros hermanos, la generación de los diversos movimientos anti-sistema que han ido apareciendo... completan la labor de esclavización; ahí seguimos sin resoplar con la debida fuerza y proporción, vamos tragando quina. Y la izquierda que debería liderar y despertarnos a la lucha social, pierde en parte su tiempo adaptándose a las formalidades burguesa del sistema sin proponer una alternativa global de cambio político, sin desengancharse claramente de la monarquía, esperando que las modestas subidas electorales que las encuestas les pronostican les refuercen, dejando, más bien abandonando, la República para otro momento en el futuro. Los republicanos, minoritarios y sin experiencia y sin resultados electorales, saliendo de las catacumbas a donde nos empujó la dictadura y sus sucesores, reclamando unos unidad y otros el carismático frente popular...
Sinceramente, en mi modesta opinión el panorama político a corto y medio plazo nos es muy esperanzador sino conseguimos confluir Izquierda Política y Republicanos en la unidad de la lucha política para mandar al carajo el sistema burgués y la monarquía impuesta que nos aplasta día a día. Solo de nosotros depende, nadie nos va a regalar nada, nadie nos va a salvar, sino lo hacemos nosotros.
Salud y República.
LA MARCA ESPAÑA
Siempre se ha dicho que España era diferente, unos pocos nos oponíamos, nos empeñábamos en que no siguiera siendo así... pero hasta hora no lo hemos logrado. Y las notas diferenciales parecen no solo confirmarse, a veces, hasta se hacen más grandes, se hacen enormes. Somos 'diferentes' y así parece confirmarse día a día...
Somos diferentes al resto de Europa porque tenemos más trabajadores parados que nadie.
Somos diferentes de Europa porque tenemos una monarquía impuesta por un dictador frente a las democracias del entorno, sin que éstas no tengan, por supuesto sus contradicciones.
Somos diferentes porque el rey se va de vacaciones (¿cuándo trabaja?) y nos lo venden como “trabajo” los medios de comunicación ( o manipulación, mejor) y más media España se emboba, se lo cree y se siente orgullosa con el 'mataelefantes'.
Somos diferentes porque solo una pequeña parte de españoles se declara católicos practicantes, pero casi todos se casan y se entierran por los ritos de la secta de los Rouco, Reig Pla, etc.
Somos diferentes por que nos privan de educación y sanidad y permanecemos ante el televisor embobados con la copa de Europa, el tenis, las corridas de toros, las olimpiadas para Madrid, la copa federaciones...
Somos diferentes porque la justicia trata desigual a los ciudadanos, solo hay que ver la celeridad con la que actúa frente a un grupo de sindicalistas del SAT que deciden tomar unos carros de alimentos para repartir entre los que nada tienen y lo lenta y comprensiva que es para perseguir a duques, banqueros manirrotos, constructores de aeropuertos sin aviones, políticos prevaricadores y corruptos...
Somos diferentes porque los pocos jueces que se acercan a la justicia con ánimo hacia la misma, inmediatamente son apartados, separados, expulsados, catalogados...
Somos diferentes por nuestra pasividad frente al endurecimiento de medidas antisociales que reparte el gobierno todas las semanas y seguimos con la “cristiana” resignación que nos predica el gran “merlín” Rouco: 'todo a causa de nuestros pecados'...
Somos diferentes porque aguantamos los atropellos de unos empresarios sin ideas ni proyectos a largo plazo, que cierran sus empresas con ERES montados en menos de 24 horas y nadie investiga la veracidad de los hechos aducidos y nos vamos con la cabeza agachada al INEN o al FOGASA...
Somos diferentes porque permanecemos indiferentes ante el abuso a nuestros compañeros y vecinos, nos callamos como si eso nos asegurara o diera patente de que no vamos a ser los próximos....
Somos diferentes porque tenemos a nuestros abuelos mal enterrados en cunetas y tapias, tras haber sido asesinados y permitimos que sigan perdiéndose sus restos y su memoria, mientras siguen levantados y protegidos los monumentos a sus verdugos...
Somos diferentes porque tenemos el peor de los sistemas electorales diseñado para que nunca la Izquierda, y mucho menos los republicanos, puedan desplazar a monárquicos y derechistas y llevamos años consintiéndolo.
Somos diferentes porque hasta nuestra Izquierda, a veces, con demasiada frecuencia, toma y participa de medidas que van contra ella misma o los ideales que pretende representar, siendo incapaces de abandonar una 'cámara de diputados' que no sirve para nada...
Somos diferentes porque los sindicatos que deberían organizarnos para luchar por nuestros derechos atropellados y limitados día a día prefieren la mesas de negociación con empresarios y gobierno que se prolongan en el tiempo sin concluir nunca a favor del trabajador, y nos limitamos a quemarnos, desencantarnos, sin ser capaces de crear alternativas que hagan posible la respuesta apropiada a los que tanto nos joden y maltratan...
Sí, somos diferentes, nos han modelado, conformado, domesticado hasta el punto que nada tenemos que ver con nuestros abuelos que dieron su vida por la República y el avance social y cultural de España...
Somos la “marca” España, la risa del mundo...
Casi no me atrevo a despedirme como siempre: salud, memoria y República.