salva opina

La catástrofe de los cavernícolas

El PP erre que erre a lo suyo: ha calificado, en un comunicado, de “mala noticia” la decisión del Tribunal Constitucional de permitir a Bildu concurrir a las elecciones del 22 de mayo. El "Oreja Grande" como lo llamaba en otro tiempo el ex-poderoso Arzallus, a Mayor Oreja, astro rey de la caverna nacional ha considerado el fallo judicial un "disparate" y una "catástrofe", y ha responsabilizado al Gobierno de la sentencia, porque, según afirma, es “el que impulsó un proceso pactado con ETA”.

Posiblemente tenga algo de razón en el tema de la catástrofe..., ¡catástrofe para los enemigos de la libertad y de la democracia como es su partido!, sobre todo en Euzkadi, coautor del secuestro de la voluntad mayoritaria de los vascos para ejercer el autogobierno junto a sus socios mal avenidos del PSE.

Sí, catástrofe para los que están siempre atrincherados contra la libertad en cualquier lugar de esta península de piel de toro, y especialmente en el País vasco. Es un acto de justicia para los que tenían secuestrada la voz e impedido el derecho a elegir y ser elegidos que con esta resolución podrán hablar, podrán decidir y eso si que representa, verdaderamente, una catástrofe para los políticos cavernícolas de ese pequeño, amable y próspero país vasco.

Los demócratas y los republicanos, que trabajamos por un democracia para todos , para una sociedad de convivencia y cooperación, de libertades plenas, de justicia es una alegría, contra lo esperado y a lo que nos tenían acostumbrados los tribunales , la decisión de respetar a esa importante parte de los vascos que optan por un soberanismo renunciando a la violencia, intentando convencer con un ejercicio pacífico de la actividad política de que lo que ellos representan es lo mejor para su pueblo.

Somos muchos los demócratas y republicanos que no estamos por la dispersión y la independencia de los pueblos que forman el actual estado español, que estamos por una república federal y democrática, socialmente avanzada, respetuosa de todos los pueblos que la conformarían y enriquecerían con sus aportaciones y su culturas. Pero la democracia es lo contrario a la coacción permanente, a la negación de derechos de terceros a decidir lo que quieren ser y como convivir... por ello nos alegramos, aunque sin compartir sus fines políticos últimos, que puedan en democracia hacer valer sus derechos políticos a trabajar por el país que ellos creen mejor. La democracia real, es posiblemente el mejor de los instrumentos para ordenar la convivencia, pero siempre observando la máxima de que mi libertad limita, necesariamente, con la del otro.

Respeto y convivencia, justicia e igualdad, solidaridad y cooperación son los retos importantes que tenemos por delante. Retos que se plasmarán, mas tarde o más temprano en nuestra República. Si de ella forman parte el pueblo vasco porque se siente cómodo y libre, sin duda, todos ganaremos.

Salud amigos y a lo nuestro: a por la República de los trabajadores de toda clase.