¡Ay, Palestina!
Estamos en plenas fiestas aquéllos que nos movemos en la zona de influencia conjunta de las Iglesias Cristianas y de los grandes emporios comerciales, las buenas palabras de felicitación y de deseos para los seres apreciados con respecto al próximo año nuevo nos dejan tiempo para un consumo desmedido. ¡Cuánto negocio detrás de una "celebración religiosa"!
Sin embargo, en la tierra dónde , según la religión predominante, nació Jesús, a donde acuden peregrinos a visitar los "santos lugares", un pueblo autóctono sufre el asedio, la miseria, la calamidad y la muerte de algunos de sus hijos por la acción planificada y violenta de las autoridades de otro pueblo, antaño perseguido por el nazismo y que parece haber ovidado lo que es el sufrimiento en propias carnes. El mundo mira hacia otra parte, a nadie de Europa, EE.UU... parece importarle el sufrimiento del pueblo palestino.
Todos los occidentales han celebrado recientemente el vigésimo aniversario de la caída del muro de Berlín, pero permanecemos indiferentes ante la violencia desmedida de las autoridades del Estado de Israel, que sigue construyendo un muro que con la excusa de la autoprotección separa a dos pueblos, les roba las mejores tierras a los palestinos y les condena a la deseperación y a la miseria por los siglos de los siglos.
Sí Salva, no hace falta pedirle a los Reyes hipocresía, esta sociedad tiene de sobra y referente a los Díaz Ferrán, te quedas corto, como corta se queda la reacción de la clase trabajadora y de quienes la representan, ¿nos hemos acostumbrado a todo? ¿con todo nos conformamos?
ResponderEliminarGracias Toni por tu aportación. ¡Cuánta razón tienes, me quedo corto ante tanta hipocresía, insolidariedad e injusticia!
ResponderEliminarPor otra parte leo en EL País de hoy: "Una superviviente del Holocausto, en huelga de hambre en solidaridad con Gaza
La estadounidense Hedy Epstein, de 85 años, participa en El Cairo en la protesta contra la decisión del Gobierno de Mubarak de impedir la entrada de ayuda a la Franja..."